No hay que tener una ideología determinada, sólo unas mínimas luces, para entender que el gobierno de España, presidido por un plagiador, mentiroso compulsivo y desalmado, no está preparado para los tiempos que corren.
El trilero ha depuesto
una diarrea de ministerios y asesores, en la creencia atea de que de mucho
vacuo, puede salir algo de mayor entidad.
No, de lo vacuo sólo puede salir vacuidad.
Es la estúpida creencia atea de que de la materia puede
surgir el espíritu.
Eso, que en la teoría es
un absurdo, en la práctica es un imposible, que sólo pueden aceptar alienados,
fanáticos y sinvergüenzas, que utilizan el argumento del ateísmo para obtener
rendimientos económicos.
Un gobierno formado por
inmaduros, que sólo tienen en común el fracaso profesional y la incapacidad para
emprender cualquier estudio académico, es incapaz de abordar ningún asunto de
estado que exija un mínimo raciocinio o el más elemental sentido común.
No hay comentarios:
Publicar un comentario