lunes, 26 de octubre de 2009

Socialismo criminal

Alguien me comenta que está molesto por el tratamiento que en el blog doy a los socialistas españoles, tildándoles de asesinos.

No quiero ser brusco, pero ese alguien me plantea una tontería.

Yo no sé lo que son los socialistas españoles, ¡cómo si los conociera a todos!

Por lo tanto no puedo decir que sean asesinos, que sean asesinos potenciales  o que tengan propensión a la diarrea.

Sé lo que dicen a través de los medios de comunicación, algunos socialistas que ocupan el poder, y que están ahí porque una mayoría de ciudadanos españoles les han votado.

Hasta aquí todos conformes, ¿no?

Salvo que se crea que el presidente Rodríguez llegó al poder gracias a un golpe de estado, apoyado por ETA y con el soporte de una fracción de la policía.

No lo sé, y que tenga presente, la ciudadanía no conocemos pruebas tangibles de ello, por lo que esa hipótesis no la contemplo.

Entonces, insisto, todos de acuerdo hasta aquí. Los socialistas españoles en el poder veneran a los que fueron, reconocidos por la historia, asesinos en el más estricto sentido del término.

No sólo asesinos, así, a palo seco, como si eso fuera poco, sino asesinos de niños, mujeres y ancianos, y torturadores de checa.

A esa chusma criminal, los socialistas actuales les dedican calles, homenajes, exposiciones,… justificando lo que hicieron.

No niegan lo que se hizo, lo justifican.

Me comentaba una persona totalmente solvente, que estando presente en una revisión de documentación de una mujer que quería reivindicar la imagen de su padre - en ese proceso de astracán que los socialistas llaman “memoria histórica” -, vivió la siguiente situación;

la mujer reivindicadora, muy exaltada por el juicio y condena que en su día se hizo a su padre, comentaba con voz airada: “¡Si no hizo nada, sólo mató dos curas!”.

La mujer no estaba de broma, simplemente exudaba lo que el gobierno socialista que controla España desde hace décadas, inculca a la población;

la Iglesia Católica era opresora, causa de todos los males, y había que aniquilarla. Como los judíos en la Alemania nazi. Por lo tanto, matar curas y católicos era patriótico.

En esa consideración, están quienes reivindican a aquellos criminales.

Y por ello les toca algo del crimen e interpreto que, si pudieran, estarían en la labor criminal.

Para los cenutrios que todavía no lo entienden, redundaré.

Probablemente habrán oído hablar de los autores revisionistas de la historia del genocidio de judíos por los nazis.

Esos historiadores niegan tal hecho, alegando pruebas y argumentos que presentan como históricos y justificando la que consideran una falsedad, creada para justificar las enormes cantidades de dinero que Alemania paga a Israel, como compensación.

Si esos autores revisionistas, en lugar de negar tal genocidio, lo justificaran, deberían ser reos de cárcel por apología del genocidio.

Cómo sólo lo niegan – ignoro si en su fuero interno lo aplauden - la cuestión queda en un asunto de credibilidad científica.

Incomprensiblemente, están perseguidos judicialmente en algunos países, lo que una baza gratuita a sus planteamientos.

Pues los socialistas que detentan el poder en España, justifican el genocidio de católicos de los años 30, con expresiones explícitas de homenaje y reverencia a los genocidas. Esa actitud es de una crueldad injustificable en la sensibilidad de nuestra época y en cualquier país civilizado sería motivo de encarcelamiento por apología del genocidio.

Parece que el asunto está claro, así como la justificación de mis comentarios sobre el socialismo, una ideología que considero reaccionaria y criminal.