San Agustín habla de sustancialmente tres cosas, para esa comunión.
De lo más importante a lo menos importante, son:
Primero, unidad en la fe en comunión con los dogmas. Si uno
no asiente al conjunto de los dogmas de la fe, no está en comunión con la
Iglesia y consecuentemente, no está en comunión con Cristo. Ese es el primer
principio y sin eso no hay nada.
Segundo. Comunión en los sacramentos. Si creemos la misma
fe, recibimos la gracia en los mismos sacramentos en diferentes ritos, pero los
mismos sacramentos.
Por ejemplo, como los ortodoxos, que de verdad son
ortodoxos, tenemos comunión de fe más o menos sustancial y comunión de
sacramentos, aunque sean diversos ritos.
Tercero, esta es la parte más externa, aunque también es
importante. Es lo que San Agustín llamaba la caridad. Pero esa caridad incluye
los vínculos de comunión jerárquica. Estar sometidos a unas autoridades
instalados jurídicamente en una estructura legal. Si no hay eso, no hay
comunión con la Iglesia
Lo siento, no puedo citar la autoría de estas palabras que
escuché de un cura, y me parecieron coherentes y bien.
Para no buscar a san Agustín, las memoricé al modo clásico
de la tradición oral y cuando tenga calma, verificaré la cita en san Agustín.
Haz tú lo mismo, no te fíes un pelo de mi tradición oral.
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