viernes, 20 de diciembre de 2024

Dios los cría y ellos se juntan.

 

¿Cómo puede haber tanta gente mala, aunada por un puño que estruja una hermosa rosa roja?

El título de la entrada lo dice.

Son asombrosas tantas maldades que salen de tan reducidas cabezas.

Y es que el mal, cuando es impune, no tiene límites.

El bien sí.

Son pocos los que resisten años ejerciendo la bondad.

Ayudando al pobre.

Deshaciendo entuertos.

Allanando la vida a los marginados.

Especialmente cuando es de gratis.

Pero los malos no se cansan nunca

de robar

de fornicar

de inhalar

de conspirar.

En fin, de ejercer el reflejo de los diez mandamientos.

…Mientras que la salud y la justicia se lo permiten.

¿Pero es que no hay una justicia divina, que ejerce cuando la justicia humana duerme?

Si se lo preguntas a un cura, te dirá que sí.

Si me lo preguntas a mí, que no soy cura.

Te diré que está por ver.

¿Porque el dolor y la injusticia privan en el mundo?

Si se lo preguntas a un cura, te dirá que es un misterio.

Si me lo preguntas a mí, que no soy cura.

Te diría, ...

Que ahora no tengo tiempo ni ganas de hablar de ello.

Quizás otro día.


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